recuerdos Pastoral Indígena
Guaranda, años 1700
Población de Guaranda,
1702: 90 familias blanco-mestizas, más unos 3.000 indios;
1760: 2.500 (cálculos de Cicala);
1790: 3.250 (cálculo aproximado, relaciones geográficas);
1813: 3.500 (Censo de Vásconez);
1823: 2.500 (Censo de Bedoya)
Guaranda como paso histórico entre Sierra y Costa, está ligada de hecho a toda la historia nacional. En lo histórico, quizás su primer sentido arranco de cuando los primeros españoles al mando de Pedro de Alvarado y del Capitán Benavides la visitaron en 1534, cuando venían de Manabí y de Amay, rumbo a la actual Riobamba.
En 1754 Guaranda estaba clasificada como uno de los siete pueblos de la jurisdicción de Chimbo y tenía, aparte del Corregidor, un Teniente que en ese año era don Nicolás de Áviles.
1760: hacia este año, visitó a Guanujo el Jesuita italiano Cicala. Encontró unos 3.000 Indios y apenas unas 5 familias de Mestizo y ningún Blanco. Todos los vecinos eran arrieros, las calles eran bien trazadas y se llegaba desde el norte por el ´Camino del Arenal´. Refiere que sus habitantes tenían mucha desidía y descuido y que, por eso el camino a la Costa llamado de ´Mushucmundu´, era muy malo (Relato histórico-topográfico, 639). El Cura era un Dominico.
Refiere el mismo Cicala que Guaranda tenía por entonces unos 2.500 habitantes, repartidos así:
Mestizos: 1.750 (70%),
Indios: 500 (20%),
Civiles o Blancos de segunda: 250 (10%).
Llama la atención la gran despoblación india de Guaranda, pues debiendo encontrarse por lo menos 4.000 Indios, aparecen solo 500, de tal manera que hay una pérdida de alrededor de 3.500 Indios en Guaranda urbana; en lo cual habría que ver 3 elementos:
a) la migración al campo, sobre todo a la zona norte;
b) la migración a la Costa;
c) el mestizaje enorme que debió haberse dado entre 1702 y 1740.
Cicala la encontró con calles anchas y rectas y empedradas la mayoría de ellas, casi todas las casas eran cuberitas de teja, pero de las 250 casas, apenas unas 10 eran ´decentes´, lo cual significaría que si había unos 250 Blancos (unas 50 familias-nucleares), apenas 10 familias vivían con cierto estatus y éstas debían ser indudablemente las que estaban cerca de la Plaza Mayor.
Por 1745 había muerto el último Párroco dominico, por lo que se convirtió desde entonces en Curato regular.
Sus habitantes eran muy empeñados al juego de cartas, dados y al truco; en verano acude allá innumerable gente para sus negocios comerciales (Cicala, 641).
Para 1763 se sabe que recibía anualmente mulas, procedientes de Loja y alrededor de 1.000 novillos (Ponce, 357). Tres años después era uno de los 12 pueblos del Corregimiento.
Para 1771 se estaba olvidando el nombre de ´Corregimiento de Chimbo´; lo certifica el hecho de que Francisco de Requeña en su descripción de Guayaquil, lo llama ya ´Corregimiento de Guaranda´, indicando además que el comercio con Guayaquil era realmente grande (P. Ponde, II, 531).
En 1773 las monjas Conceptas de Riobamba ya eran dueñas de las famosas Haciendas de Illangama,Espino y Saapata, así coo de Quinuacorral. Las monjas debían al Alcalde don Juan Camacho por diezmos y por cría de ganados en esas propiedades.
LA MINA DE GUANGULIQUÍN
LA MINA DE GUANGULIQUÍN
La memoria oral más vieja de la historia de Guaranda, se remontaba en 1870 a 1750, es decir a 120 años anteriores. El dato con el cual principiaba la Crónica familiar se remonta a cuando los españoles explotaban la Mina de Plata de Guanguliquín, cerca de Simiatug. Por eso los vasos sagrados de su Iglesia eran de plata. A fines del siglo XVIII se abandonó su explotación, según el Dr. Chaves. Sin embargo, aún en 1820 algún Indígena minero obtenía partículas de plata que las vendía en Guaranda de manera doméstica